El registro de propiedad es un trámite no obligatorio pero sí recomendable en el proceso de compra o adquisición de una vivienda. El motivo por el que es aconsejable realizar este registro es porque aporta seguridad jurídica al propietario, protegiendo al titular del inmueble y por lo tanto, facilitando cualquier trámite ante una posible posterior venta de la vivienda.
Sin embargo, uno de los inconvenientes de este trámite podría ser el gasto que supone llevar a cabo el registro, que varía según sea el valor que se le haya otorgado a la vivienda en las escrituras, por lo que no es un trámite con un precio exacto, sino que depende del valor, el Real Decreto 1427/1989 estipula cuánto sería el máximo a cobrar.
Según esta idea, el registro de propiedad se calcula de la siguiente manera:
*Estas cifras de costes son actuales, pero están sujetas a cambios que puedan incrementar o decrecer el importe en un futuro.
Campo obligatorio