En la era moderna, la sostenibilidad se ha convertido en un pilar fundamental en la forma en que operamos y administramos nuestras actividades diarias. En el corazón de esta transformación se encuentra la oficina, ese lugar donde muchos pasan gran parte de su día a día, un espacio donde la gestión adecuada de residuos puede marcar una gran diferencia en la reducción de la huella de carbono y la preservación del entorno donde operamos.
La reflexión sobre qué desechos generamos, cómo los manejamos y qué podemos hacer para minimizarlos es esencial en el camino hacia un mundo más sostenible.
¿Cuáles son esos tipos de residuos que nos podemos encontrar en espacios de oficina?
Puede que los residuos del hogar los tengamos mucho más presentes porque somos los responsables de separarlos y gestionarlos, sin embargo, en los espacios de oficinas también tenemos la posibilidad de ser responsables de lo que generamos. Los residuos más comunes que pueden ser reciclado en la oficina incluyen papel y cartón, plástico, vidrio y electrónica
Fomentar la separación adecuada y la disposición en contenedores específicos para cada tipo de residuo facilita su reciclaje y reutilización, contribuyendo así a la reducción de la cantidad de desechos que terminan en vertederos.
¿Cómo podemos reducir los residuos que generamos en la oficina?
La adopción de medidas simples pero efectivas puede ayudar a reducir significativamente los residuos que generamos. Te enumeramos algunos de los ejemplos que se han vuelto clave en muchas empresas que buscan disminuir su impacto medioambiental:
- Digitalización: La transición hacia un entorno más digital puede reducir drásticamente la cantidad de papel utilizado en la oficina. Fomentar el uso de documentos electrónicos, firmas digitales y almacenamiento en la nube no solo minimiza el uso de papel, sino que también facilita el acceso y la gestión de la información.
- Políticas de impresión sostenible: Implementar medidas de impresión a doble cara, el uso de fuentes de letra eficiente en términos de tinta, y la reducción del margen de impresión pueden disminuir significativamente el consumo de papel.
- Compra responsable: Optar por productos de oficina que sean duraderos, reutilizables o biodegradables puede reducir la cantidad de desechos generados. Adquirir suministros en envases a granel o en formatos más grandes también ayuda a minimizar los residuos de embalaje.
- Reutilización de suministros: Promover la reutilización de elementos como carpetas, sobres, bolígrafos y otros suministros de oficina puede extender su vida útil. La utilización de tazas, platos y utensilios reutilizables en lugar de desechables para eventos y reuniones también contribuyen a reducir los residuos generados.
- Educación y sensibilización: La conciencia y educación de los empleados son fundamentales. Organizar talleres, compartir consejos prácticos y ofrecer pautas sobre cómo reducir el desperdicio puede motivar a los colaboradores a adoptar comportamientos más sostenibles en su rutina laboral diaria.
- Reciclaje de consumibles: Implementar programas de reciclaje de consumibles de oficina, como cartuchos de tinta de impresora y tóner, para asegurar su correcto tratamiento y evitar que terminen en vertederos.
¿Cómo podemos reutilizar los materiales de oficina?
La reutilización de materiales es una práctica que puede ser fácilmente implementada en el entorno de oficina. Optar por muebles reacondicionados o de segunda mano no solo reduce la generación de residuos, sino que también puede aportar un toque único y creativo al espacio de trabajo. Promover el uso de utensilios y recipientes reutilizables no solo disminuye los residuos, sino que también fomenta una cultura consciente del medio ambiente entre los empleados.
En nuestro compromiso con la sostenibilidad, en Realia entendemos la importancia de la gestión responsable de residuos. Por ello, trabajamos en dar siempre el mejor servicio y la mejor gestión en nuestros edificios de oficina. Contamos con gestores de residuos autorizados que garantizan una adecuada segregación y disposición de los desechos y con políticas de aprovisionamiento responsable en los edificios que tienen el certificado BREEAM en Uso. A través de estas prácticas, no solo abrazamos una cultura empresarial sostenible, sino que también apoyamos activamente iniciativas que fomenten un entorno laboral más respetuoso con el medio ambiente y con el futuro de nuestro planeta.