¿Te han pillado las lluvias y bajas temperaturas con la ropa de verano ocupando gran parte de tu armario? ¡Esto no puede ser! Necesitas saber cómo hacer el cambio de armario para aprovechar mejor el espacio y encontrar la ropa fácilmente.
En este artículo hacemos un repaso por los consejos que te ayudarán a hacer el cambio de armario fácil y rápido.
El primer paso que todos debemos dar cuando hacemos el cambio de armario es sacarlo todo. Sí, como lo estás leyendo. Todo es todo. Fuera ropa, fuera perchas, fuera organizadores… Deja el armario completamente vacío.
A lo largo del invierno, las puertas del armario pueden propiciar que aparezca polvo. Además, las prendas pueden soltar hilitos que se vayan acumulando en el armario. Por eso, una vez que esté totalmente vacío, llega el momento de coger tu mejor paño y el limpiador de muebles para dejar el armario reluciente.
Si tienes ropa de verano que guardaste en bolsas o cajas durante el último cambio de armario, sácala y ponla sobre la cama para poder seguir el siguiente paso.
Ha llegado el momento de separar la ropa. Para que te resulte más fácil, puedes utilizar la cama para hacer diferentes montones.
El primer montón será el de la ropa de verano, la que te vas a poner durante esta temporada. Revísala bien para asegurarte de que no tiene rotos, descosidos, manchas o cualquier otro defecto que impida que te la pongas.
Las prendas de invierno deben desaparecer de tu armario durante el verano. Las chaquetas, abrigos, anoraks… ocupan mucho espacio y pueden impedirte encontrar con facilidad las prendas de verano, que son más ligeras.
Te aconsejamos dejar alguna chaqueta en el armario. Así, si durante el verano te sorprende un día de frío, estarás preparado para hacerle frente sin desmontar media casa para encontrar un abrigo.
Si has encontrado prendas con rotos, descosidos, manchas… Debes separarla del resto. ¿Qué harás con ella? Todo depende de ti. Puedes utilizarla para hacer trapos, reciclar en alguna de las tiendas que te ofrecen descuentos por llevar ropa usada, guardarla para hacer manualidades o reutilizarlas…
Durante tu selección, seguro que encuentras prendas que están en buen estado, pero que no quieres ponerte más. Si ese es el caso y conoces a alguien a quien le pueda venir bien, haz un montón de ropa para regalar.
La ropa de la temporada que acaba de terminar debe guardarse de forma que no se estropee. Así, cuando llegue el invierno de nuevo, tendrás tus prendas en perfecto estado.
Una forma eficaz de guardarlas para que ocupen el menor espacio posible es utilizar bolsas de vacío. Estas bolsas, que puedes comprar en cualquier tienda de variedades, son perfectas para guardar prendas de ropa como los plumíferos, que ocupan mucho espacio.
Una vez que te has quedado solamente con la ropa que sí te vas a poner, llega el momento de guardarla en el armario. Recuerda definir muy bien qué espacio ocupará cada tipo de prenda para que no te cueste encontrarla después.
Por ejemplo: la ropa de estar en casa, en los cajones; los pantalones, de dos en dos, en perchas especiales para aprovechar espacio, etc.
Esperamos que estos consejos te ayuden a saber cómo hacer el cambio de armario. ¿A qué esperas? Empieza hoy mismo a vaciar tu armario para hacer sitio a la ropa de la nueva temporada.
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